Todo lo que nos rodea ya estaba aquí antes de venir nosotros. Creencias, paradigmas, reglas, normas, sociedad. Sin embargo con el transcurso del inexistente tiempo, sabemos que la mayoría de las cosas no responden a conceptos que llevamos por dentro: paz, justicia, amor, agradecimiento, amistad, familia, desarrollo espiritual. Pareciera que dejaremos este plano llenos de dudas, remordimientos, frustaciones y deseos. Creo que la realidad es lo que cada uno de nosotros hace de ella y que podemos cambiarla en la medida en que creamos constantemente que podemos. Si todos lo hiciéramos, nuestra mejor realidad sería la realidad de todos.