Decir que estas son fotos de la Primera Comunión de Carlos, es bastante exagerado: No se ve en estas imágenes ni a Carlos ni ninguna ceremonia. Más bién son fotos de la reunión familiar que celebraron los adultos después del acto religioso, mientras los niños se divertían en el jardín. Presento estos retratos aquí en baja resolución (para que no tarden mucho en aparecer en la pantalla una vez que hayáis pinchado en la correspondiente miniatura); por esto no tienen suficiente calidad para ser impresas. (Si alguién quiere copias en papel, tendrá que pedirselas a Olga.)
También existe el album correspondiente en blanco y negro que —por cierto— me parece más interesante; será cuestión de gustos...
Y otra cosa: la ley protege el derecho de cada persona a su propia imagen. Si a alguién le molesta que un retrato suyo se encuentre aquí, que nos lo diga; eliminaría, por supuesto, la foto en cuestión de estas páginas. — db.